Álex Grijelmo, sobre el lenguaje en la prensa deportiva: «Se llama colegiado al árbitro y no al dentista, aunque pertenezca a un colegio»
La Feria del Libro de Madrid volvió a abrir sus casetas ayer lunes con las energías renovadas después de un primer fin de semana intenso y emocionante. Los cielos estaban despejados y el calendario repleto de eventos y actividades variadas, para satisfacer a todos y cada uno de los lectores y lectoras, sin importar la edad o los gustos literarios.
El salón de actos de la Biblioteca Municipal Eugenio Trías completó su aforo para rendir sendos homenajes a dos grandes figuras de la literatura infantil en español: Mafalda, de Quino, y Celia, de Elena Fortún. Estas dos niñas que salieron del papel y la tinta para hacernos pensar fueron, y siguen siendo, referencias para la literatura de varias generaciones, todavía en la actualidad. Se sigue editando sobre ellas. Pertenecen a épocas muy diferentes, ellas son distintas entre sí, pero también guardan cosas en común.
Mafalda sigue hoy siendo una niña de carácter incorruptible y su lectura es igual de contestataria ahora que comienza a peinar canas. Quizá las tiras de sus viñetas han perdido su característico color de portada, pero la vigencia de lo que dice en sus páginas en blanco y negro sigue inquebrantable. Al final, 60 años no son nada…
Celia, sin embargo, creció. Creció para acompañar a una generación de niñas y se fue a la revolución, se casó… se hizo mayor. La editorial Renacimiento ha reeditado los libros de la saga de Celia con el trabajo y la colaboración de más de 40 especialistas de todas las ramas de investigación para recopilar materiales de Fortún durante su exilio, inventarios y cartas. La doctora en Filología Española María Jesús Fraga ha conversado sobre la importancia del personaje creado por Elena Fortún para toda una generación junto a la investigadora Inmaculada García Carretero, Nuria Capdevila y la ex alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena. Un encuentro entre amigas y lectoras de Fortún, en el que han reflexionado sobre lo que supuso la lectura de Celia en aquellas niñas.
Mafalda tampoco hoy entendería el mundo que le rodea. De eso han charlado Lola Martínez de Albornoz, editora de Lumen, la escritora Nuria Pérez y el ilustrador Fernando Vicente, en esta celebración del cumpleaños de Mafalda. Lumen ha editado un libro que podría definirse como la biblia de Mafalda. Lleno de secretos de la intrahistoria de sus páginas, explicaciones del contexto social, detalles y referencias desconocidas hasta ahora. Es una obra que además se completa con una gran colección de cartas de sus fans, atravesando la cuarta pared de la lectura. Martínez de Albornoz, dice que Mafalda fue el germen del futuro compromiso de muchas niñas y niños: «De repente te veías buscando en tu diccionario la palabra democracia, amnistía… En una tira de viñetas cabía la educación, la reflexión, la crítica, el humor… «Cortázar decía que lo importante no era lo que él pensara de Mafalda, sino lo que ella pudiera pensar de él», recordó Pérez.
‘Rodando Páginas’ por séptima vez
Este lunes se presentó la séptima edición de Rodando Páginas, del libro a las pantallas, taller que ocupa durante los días 3, 4 y 5 de junio la Biblioteca Municipal Eugenio Trías. Es una iniciativa diseñada para unir el mundo literario y audiovisual, un sector convulso y en constante cambio.
Para Carlo D’ursi, presidente de AMA, se trata de «una propuesta de mejora de la industria, un encuentro entre el mundo editorial y el audiovisual, que habla de letras, pero que se avala con números: en las seis ediciones del taller, se ha presentado un total de 800 obras y el 20 % de ellas ya se encuentra adaptadas o en proceso». Además, defiende ir a la misma velocidad en la adaptación, si se puede, que la evolución de los nuevos formatos. No solo cine o series. También pódcast y videojuegos, entre otros. El objetivo, añadió D’ursi, es «impulsar el sector sin perder nunca de vista los derechos de los autores».
El proyecto está organizado por la Asociación Madrileña Audiovisual (AMA) y la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE), y, además, cuenta con el apoyo de la Comunidad de Madrid, el Ayuntamiento de Madrid, el Centro Español de Derechos Reprográficos (CEDRO), la asociación de Derechos de Autor de Medios Audiovisuales (DAMA) y la Feria del Libro de Madrid.
Con motivo del estreno de esta 7ª edición ya puede consultarse el Catálogo profesional de obras seleccionadas disponibles, Rodando Páginas, 2018-2023.
Políticos y coles
La Feria recibió ayer la visita de varias personalidades de la política local, autonómica y estatal. El ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, llegó acompañado de Juan Lobato, portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en la Asamblea de Madrid; Reyes Maroto, portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Madrid; y Mar Espinar, diputada del Grupo Socialista de la Asamblea de Madrid. Acompañados por Eva Orúe, la comitiva recorrió parte del Paseo de Coches entre casetas y curiosos. Mostró sus preferencias por Santiago Lorenzo y Eduardo Mendoza.
Casi a la misma hora, Luis Planas, ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación de España, comenzó su visita saludando a los trabajadores de la caseta de su negociado. Allí se interesó por la oferta disponible y aprovechó para llevarse algún ejemplar del Catecismo de agricultura, de S. Calleja para regalar después. También compró Primavera revolucionaria, de Christopher Clark, en la caseta de Marcial Pons, y un ejemplar de Aforismos y Serendipias, de Ramón Eder, en la caseta de la editorial Renacimiento. Por último, antes de despedirse, se ha acercado a la caseta de la Librería de Tipos Infames para adquirir Kairós, el reciente libro de Jenny Erpenbeck. En esta ocasión, a la comitiva se unió Enrique Pascual, presidente de la Feria del Libro de Madrid.
Otro de los grupos visitantes del lunes fueron varias tandas de esos locos bajitos, como cantaba Serrat. Los más pequeños han podido disfrutar de varios talleres diseñados especialmente para ellos, como el de estampación en el Pabellón CaixaBank. Las niñas y niños de 2º de Primaria del CEIP Fuente del Palomar, de Alcorcón, se afanaron en ilustrar pictogramas olímpicos con ciclistas, atletas, balones, canastas, medallas, e incluso, el pebetero de la llama olímpica, que algunos conocieron en el mismo momento. La Feria instruye al mismo tiempo que entretiene.
La Feria que se escucha, poemas que se lanzan
‘Carne Cruda’, el pódcast de Javier Gallego ‘Crudo’ y Violeta Muñoz, estrenó el Teatro Casa de Vacas como nuevo corazón radiofónico de la Feria del Libro de Madrid dentro de El Retiro. El libro se lee, pero también se escucha, se siente. El latido de la radio se escuchó ayer a última hora con un programa dedicado a las editoriales raras y bizarras. Con la directora de la Feria, Eva Orúe, y Pepe Olona, coordinador del espacio Indómitas, se desgranó qué requisitos se necesitan para estar en el mismo.
El verdadero protagonista del episodio venía enlatado, (por seguir con el léxico radiofónico) y fue el regalo que recibió el presentador durante la retransmisión. La conocida como Lata Indómita, que contiene en su interior un Poema para ser lanzado, de Antonio Gómez. Una obra especialmente preparada para esta segunda edición del espacio. Al recibir el regalo, ‘Crudo’ exclamó al micrófono: «¡Es una piedra!» La misma reacción que había tenido la reina Letizia cuando se le hizo entrega de un ejemplar en su visita al espacio Indómitas.
Calienta, que sales
Estar fuera de juego, salvarse por la campana, tirar la toalla, ser duda en un partido, quedar KO, chupar rueda, meter de chilena, ganar unas elecciones por goleada…, el lenguaje deportivo permea en la sociedad hasta que se olvida el origen de una u otra expresión. En la charla ‘El deporte de la lengua’, en el Pabellón CaixaBank, el periodista y escritor Álex Grijelmo, junto al filólogo y académico Pedro Álvarez de Miranda, resolvieron las dudas de algunas de esas expresiones. Unas derivan del mundo deportivo y tienen su origen en una cancha de tenis, o en las reglas de un juego, en la grada de un campo de fútbol… Por el contrario, también existen palabras y fórmulas que se utilizan día a día y que han sido inventadas especialmente para expresar o definir algo del mundo deportivo.
En la prensa deportiva, explicó Grijelmo, «existe mayor permisividad que en otro tipo de prensa y en las gradas del futbol, cuando se recuerda al árbitro, hay una gran creatividad e inventiva», bromeó el periodista. «Se llama, por ejemplo, colegiado al árbitro y no al dentista, aunque pertenezca a un colegio de igual manera». Álvarez de Miranda defendió la propia palabra deporte, de origen castellano, frente al término sport, de origen inglés, y que ha conquistado las lenguas europeas, hasta en los nombres de los equipos, que son de fútbol, y no de balompié, a excepción del Betis y el Albacete», concretó Grijelmo. Y pumba, patadón parriba, que diría Clemente, seguimos la pelota hasta el siguiente evento, ¡esto no para! La mejor hinchada, la de la Feria del Libro de Madrid.
Foto © Patricia J. Garcinuño
